Venta de Piqueras - , La Rioja

Venta de Piqueras es un establecimiento ubicado en la dirección N-111, Km. 265, 26125, La Rioja, España. Este lugar es conocido por ofrecer una experiencia única con su bar restaurante y restaurante, lo que lo convierte en un destino perfecto para aquellos que buscan disfrutar de una comida deliciosa en un ambiente acogedor y agradable.

Cabe mencionar que Venta de Piqueras cuenta con una amplia variedad de especialidades, entre las que se incluyen bar, restaurante, terraza, comer allí, a domicilio, buen café, buenos postres, chimenea, desayuno, comida, cenar solo, acceso para sillas de ruedas, aparcamiento adaptado para sillas de ruedas, aseo adaptado para sillas de ruedas, asientos adaptados sillas de ruedas, bebidas alcohólicas, café, cerveza, cócteles, comida, comida en el bar, comida rápida, comida saludable, licores fuertes, platos pequeños, vino, desayuno, brunch, comida, cena, postres, sitio para sentarse, acogedor, histórico, informal, tranquilo, grupos, turistas, se aceptan reservas, pagos con móvil vía NFC, tarjetas de crédito, tarjetas de débito, tarjetas de crédito, adecuado para niños, menú infantil, tronas y aparcamiento en la calle gratuito.

En términos de opiniones, Venta de Piqueras cuenta con un total de 1455 valoraciones según Google My Business, con una puntuación promedio de 4.4/5. Esto demuestra que el establecimiento es altamente valorado por sus clientes y es un lugar que definitivamente merece ser considerado.

👍 Opiniones de Venta de Piqueras

Federica C.

1/5

Este domingo mi pareja y yo fuimos de paso por la montaña y decidimos pararnos a comer en ese lugar fantástico con encanto. Las montañas rodeadas de nieve y naturaleza: todo perfecto. Llamamos para reservar y nos dijeron que no se aceptaban reservas y que si íbamos nos daban de comer; cuando llegamos no nos sentaron en el comedor sino en la cafetería que era perfecta con una vista espectacular. Debido a la localización nos cambiaron de mesa lo que no supuso ningún problema para nosotros. La comida y la presentación de los platos fue maravillosa, sin embargo la atención de la camarera fue nefasta: tras terminar el primer plato que eran patatas a la riojana y alubias con almejas servidas con guindillas, al dejar algunas almejas que estaban cerradas y cáscara en el plato de las guindillas, la señora de melena nos comentó que era preferible que pidiésemos otro plato porque ella iba a utilizar el resto de comida para alguna mesa más. Es un precio bastante económico pero hablamos de salud alimentaria y buenas prácticas de manipulación. Rogamos sea corregido ese tipo de práctica porque puede conllevar peligro para la salud pública. Cabe decir que al final pedimos de postre unas mandarinas y nos las sirvieron peladas, también tengo que pensar que eran restos de otros comensales?

Diana D.

1/5

Hace dos semanas que fuimos a este restaurante, que reservamos previamente y es verdad que llegamos 10 minutos tarde, lo que decidieron que era buena idea sentarnos en la mesa e ignorarnos por 45 minutos con la excusa que hemos tardado y que hay que llegar a tiempo, que había gente esperando a sentarse en mesas para comer y no había nadie porque reservamos a última hora.
La comida deja mucho que desear, las alubias estaban sosas no tenían ningún tipo de sabor, los macarrones estaban buenos, el postre podría haber más variedad, no solo natillas y flan.
El sitio muy bonito pero la atención de los camareros y la forma en la que te atienden deja mucho que desear, definitivamente no volveremos.

Javier G.

2/5

Reservamos a las 14:00, nos sentaron a las 14:40. Otras mesas estaban reservadas, la nuestra no. Nos tomaron nota a las 14:50. Para ese momento ya no quedaban algunos de los segundos que elegimos. La comida adecuada al precio. Es un menú del día de 22€. Nuestros platos estaban salados. Muy buenos caparrones, menestra de bolsa congelada, filete pobre, cordero correcto. Flan de cuajada para tirar.

Juan A.

5/5

Un sitio idílico en la Sierra de Cebollera. Reservamos a comer y ya solo por el magnífico entorno que lo rodea ya enamora. Llegamos a las 15:00 y el servicio fue impecable, las chicas super atentas con todo y servicio rápido aún siendo el segundo turno de comidas. Ponen puchero en la mayoría de platos para que puedas repetir lo que quieras. Todo estaba espectacular. Una lastima que no quedasen ya las natillas caseras, pero así tenemos una excusa más para volver.

Jonathan

4/5

Nosotros solo estuvimos en el restaurante ya que estábamos de paso y la verdad que calidad-precio nos sorprendió. Probamos las migas con huevo de primero y estaban realmente buenas y como segundo plato guiso de cordero donde la carne estaba sabrosa, como postre elegimos flan de cuajada y las natillas y los 3 postres están geniales. Si se pasa por la zona recomendamos su visita.

SOR

2/5

No puedo opinar sobre las habitaciones puesto que sólo estuvimos comiendo
El sitio es precioso, con el riachuelo al lado y rodeado de vegetación
En cuanto a la comida, hecha con muy poco cariño, mi menestra estaba aliñada con una salsa aguada y con poco gusto. Los caparrones casi parecido, flotaban, no tenían el caldo trabado y solo llevaban chorizo, es una pena porque el entorno no puede ser más bonito pero la cocina tiene mucho que mejorar

Javier

5/5

Menú muy rico y a buen precio. De primeros los caparrones espectaculares, y muy buena variedad de segundos: entrecot, manitas de cerdo, chuleta,... Un lugar 100% recomendable para comer un menú con pan vino, postre por 22 euros y riquisimo todo. El servicio muy amable

Paula R.

3/5

El sitio es una maravilla, con una campa enorme y al lado de una ruta supersencilla y preciosa, la de Las Majadas. Se debe comer muy bien, olía de lujo... pero pese a tener varios salones, si vas con perro no tienes más opción que la terraza y hacía frío. Una pena, en zonas de naturaleza y montaña somos muchos los que vamos acompañados de familia peluda.